Tres tendencias prometedoras en agricultura, blockchain y trazabilidad

A medida que entramos en una nueva era de avances tecnológicos, resulta cada vez más claro que el futuro de la agricultura radica en incorporar la innovación y adoptar soluciones de vanguardia. Aprovechar las tecnologías emergentes es esencial para el crecimiento y desarrollo sostenible de la agroindustria.

El mercado, en general, ya ha entendido que los datos son la base de una estrategia empresarial eficaz. Y en la agroindustria, que procesa miles de datos cada día, esto ciertamente no es diferente. Los sistemas ERP, por ejemplo, son sistemas que registran y controlan toda la información sobre una explotación agrícola, almacenando datos de producción, compras, existencias, incrementos agrícolas, etc. De esta manera, es posible monitorear la información relativa a la propiedad y la producción en tiempo real.

También en esta lógica, blockchain es una tecnología de registro de transacciones que permite la creación de una base de datos donde se registran las transacciones y la información en bloques agrupados que se conectan mediante criptografía. Proporciona seguridad, transparencia y confiabilidad en las transacciones, eliminando intermediarios y permitiendo el seguimiento y verificación de cada operación realizada. Ser capaz de afrontar diversos desafíos que atraviesa el sector agrícola, como las ineficiencias de la cadena de suministro, la falta de confianza y la asimetría de información.

Al ser una tecnología que mitiga el fraude – ya sea contractual o de producción – y hace que las operaciones sean completamente seguras, puede ser de gran valor para la agroindustria. Sabemos que una de las mayores demandas del mercado hoy en día es la posibilidad de trazabilidad de toda la cadena de suministro, pudiendo monitorear y registrar puntos de datos críticos, como condiciones del suelo, uso del agua, medidas de control de plagas, rendimiento de los cultivos, manejo posterior de la cosecha e incluso rastrear las condiciones climáticas. Este nivel de información granular permite una toma de decisiones proactiva, una asignación optimizada de recursos y una mayor eficiencia operativa.

Esta tecnología se puede utilizar ampliamente en diversos segmentos de la agricultura, por ejemplo, para rastrear el movimiento del ganado y garantizar que se críe de acuerdo con las normas de bienestar animal. También se puede utilizar para realizar un seguimiento del uso de pesticidas y fertilizantes, asegurándose de que se utilicen de forma segura y responsable.

Hay dispositivos aún más modernos, como IoT (Internet de las Cosas), drones y otras tecnologías de trazabilidad más comunes en nuestra vida diaria, como teléfonos móviles y tabletas, que pueden ser implementadas directamente en el campo e integrarse en un sistema de gestión, actualizando automáticamente esta información. Este proceso añade más agilidad y productividad a las empresas, además de aumentar todavía más la confiabilidad de todos los procesos productivos.

Asimismo, la trazabilidad en general ayuda a generar confianza entre las partes interesadas, especialmente los consumidores, que son cada vez más conscientes de sus elecciones de alimentos, conocer el origen y los métodos de producción de sus alimentos puede ser un factor importante en el proceso de toma de decisiones. Los sistemas brindan información autenticada y acceso a registros confiables de cada paso, incluida la plantación, el cultivo, la cosecha, el procesamiento, la distribución y la venta minorista, desde un simple código QR, lo que les permite tomar decisiones informadas y respaldar prácticas sostenibles y éticas.

Para aprovechar plenamente el potencial de blockchain y la trazabilidad agrícola, la colaboración y la participación de las partes interesadas son esenciales. Las empresas, los agricultores, los proveedores de tecnología, los reguladores y los consumidores deben trabajar juntos para establecer estándares para toda la industria, garantizar la interoperabilidad y promover una adopción generalizada.

También es importante resaltar que blockchain u otras tecnologías de agrotrazabilidad son un apoyo importante para la agenda ESG, tanto para el pilar de Gobernanza, ya que promueve la transparencia en los negocios y en todo el recorrido productivo, como para el pilar Ambiental, que rastrea y garantiza buenas prácticas durante todo el proceso de producción.

Además de blockchain y la trazabilidad, existen otras tendencias que marcarán el futuro de la agricultura. Vale la pena mencionarlo:
•El auge de la agricultura de precisión:
la agricultura de precisión utiliza datos y tecnología para optimizar la producción agrícola. Esto incluye el uso de drones para monitorear la salud de los cultivos, sensores para rastrear la humedad del suelo y software para automatizar el riego.
•El crecimiento de la agricultura vertical: un tipo de agricultura de interior que utiliza capas apiladas de plantas para cultivar alimentos de manera más eficiente. Esta es una solución prometedora para las zonas urbanas donde el suelo es escaso.
•El desarrollo de nuevas variedades de cultivos: los científicos están desarrollando nuevas variedades de cultivos que son más resistentes a plagas y enfermedades y que pueden cultivarse en entornos más desafiantes.

Y hablando de tendencias, observamos que la inversión en tecnologías que funcionan antes y después de la puerta está creciendo. En este sentido, es importante destacar soluciones orientadas a la confiabilidad de la información agrícola, la gestión de riesgos y el aumento del rendimiento digital. Este es un camino general. El blockchain tiene mucho que ver con estos puntos, ya que permite mitigar los riesgos, tanto en el proceso de producción como en el comercio financiero.

Es fundamental el compromiso de facilitar esta colaboración y brindar soluciones tecnológicas integrales que empoderen al sector agrícola para abrazar el futuro. Sabemos que el agronegocio es una potencia y que, cada año, se desarrolla más y más. Invertir en tecnología es fundamental para que los pequeños, medianos y grandes productores mantengan la sostenibilidad empresarial a largo plazo y operen de manera correcta, confiable y exitosa.

*Por Javier Marbec, director de Mercado Internacional da TOTVS